Wednesday, July 04, 2012

“Don Sergio”



La reciente celebración del día internacional del libro no paso inadvertido en la región, pues los eventos y notas periodísticas no dejaron algunas conclusiones muy relevantes sobre la producción editorial  se habla de un promedio de 14 libros al año   nacidos en  La Araucanía, la tarea entonces será establecer su contribución a los campos de conocimientos y ayudar a difundirlos. Hoy nos referiremos a uno editado el año 2009 por la Universidad Católica de Temuco: “La Acción Social  en la Diócesis de Temuco, El período pastoral de Monseñor Sergio Contreras Navía”.
No haremos en esta columna un análisis del texto escrito por  un sociólogo Luzio Iriarte, un sacerdote Juan Leonelli y un diacono Guillermo Díaz  todos  actores a su manera del período descrito, pero si  quisiera resaltar su relevancia. El texto no es una  semblanza de la persona del  obispo, sino un acercamiento multidisciplinario y testimonial,   que  busca dar cuenta  de  la acción de la iglesia  derivada del Concilio Vaticano II   y que tuvo  una particular consideración de la Diócesis, en virtud de  una historia con propia que la diferencia de  la del resto del país  “La historia reciente de La Araucanía es corta y la situación es explicable desde los acontecimientos que se han ido sucediendo en algo más de 100 años” (pag31)
En este contexto, el período crucial en que le toca  ejercer su misión pastoral a Monseñor Contreras  trasciende  en su protagonismo los límites de la Iglesia y lo convierten en  un referente central desde su llegada, por cuanto  bajo el alero de la Iglesia  se  hará la defensa de los derechos humanos, se rearticulará el movimiento indígena y  la acción de los Organismos No Gubernamentales (ONGs) que serán una importante fuente laboral para profesionales excluidos del estado por  su ideología y  que  ejecutarán iniciativas locales de desarrollo que posteriormente servirían de modelo para lo que se implementaría en democracia. Los finales de los setenta y la década de los ochenta la  fuerte  pero comprensiva personalidad de “don Sergio” como lo solíamos nombrar los que no  éramos  personas ligadas directamente a la Iglesia fue una autoridad protectora y alerta a las arbitrariedades y abusos  proveniente del autoritarismo.  A su valor como hombre de fé , le sumaba su capacidad organizativa y resolutiva  fruto suponemos de su formación de ingeniero, creo que expresó a mucho de que estábamos aquí por entonces, que debemos agradecerle   su   gestión en  tiempos  peliagudos.
Una vez más la imagen dice más que las palabras, la portada de libro muestra al prelado con un megáfono subido en una carreta dirigirse a esa multitud de mapuches que  participo del  “Encuentro del Conunhueno “   en el año 1979  y  siempre se dirá de él “no dirige los encuentros ni trata de ser el centro, pero suelen encargarle el saludo inicial, cosa que hace con mucho cariño  y profundidad. Al mismo tiempo, siempre deja un mensaje sugerente,  que invita al protagonismo, a hacerse cargo de la realidad a vivir una fe encarnada y transformadora de  las circunstancias” (pág 99) .  Así pues en la historia larga de esta nuestra Araucanía, habrá  que dar cuenta que de  esos tiempos en que  los inviernos parecían aun más fríos y la desolación a ratos parecía  dominarlo todo, hubo  un pastor que  asumió como su rebaño a todos sin distinción y nos animó a que lucháramos por nuestros derechos  con las herramienta del entendimiento y de la paz.

No comments: